sábado, 11 de febrero de 2017

En Toluca, toman clases sin luz desde hace un mes

9 febrero 2017 | Fernando Sánchez del Paso | El Heraldo
Cerca de dos mil estudiantes de la Escuela Lic. Juan Fernández Albarrán, en el centro de Toluca, sufren desde hace un mes la falta de energía eléctrica, sin que la Comisión Federal de Electricidad (CFE), o la secretaría de Educación brinden respuesta, lo que ha generado el día de hoy menores de edad tomando clases dentro de espacios en la penumbra. De acuerdo con director del plantel, José Antonio Gutierrez Martínez, desde el nueve de enero sufren esta inconsistencia originado de inicio por el cambio de medidores por parte del CFE, así como el tiempo de vida de la instalación eléctrica del plantel, la cual data de hace más de cuatro décadas.
Explica que la llegada de un mayor voltaje y la inestabilidad del mismo, generó que su instalación eléctrica colapsara, con lo que además de quemar el equipo terminó dañando los cables de suministro.

"Es una falla de la Comisión Federal de Electricidad porque con ese exceso de voltaje hace que la instalación de ponga al rojo vivo, no aguantan los cables y muchos se llegan a fundir, hay corto".

Ante ello informa que solicitaron la atención de CFE quien evadió la culpa asegurando que es un problema, no de suministro, sino de la instalación del plantel, por lo cual recurrieron a la secretaría de Educación, quien sólo los envío a la Dirección General de Educación, y ellos a vez al Instituto para reparación de Edificios de Gobierno.

Este último los puso en su calendario de reparación y espera, por lo que no hay fecha para determinar cuándo quedará solucionado el problema.

"Tenemos todo para empezar a trabajar lo que necesitamos es la autorización del jefe de este departamento, pero como todas las escuelas tienen peticiones para esta área, las ponen, ahora si que como vengan llegado, ya tenemos nuestro lugar pero hasta que no se resuelvan los problemas de las escuelas que están frente a nosotros van a atender nuestro problema", reprocha.

Advierte que el problema se incrementa toda vez que son 50 salones con mil 400 alumnos de primaria y 600 de secundaria para los cuales se carece de energía para hacer funcionar las bombas de agua en la operación y limpieza de los baños escolares.

"La cisterna está enorme está llena pero con que subimos el agua a los tinacos de arriba, los sanitarios están desastrosos, puede haber un contagio tremendo, el problema no solo es visual que ya es bastante fuerte", advierte.

Indica que en las tardes desde las cinco o en días nublado no se puede tomar clases, además aquellos que entran a las siete de la mañana y está obscuro tienen que tomar sus clases con sus celulares en manos para alumbrarse.

"Quienes están sufriendo con mayor grado son los estudiantes de secundaria que salen a las siete" finaliza.

La escuela, que alberga tanto a alumnos de primaria y secundaria y que no ha tenido ninguna reparación desde su fundación hace 47 años. Al momento también los servicios escolares están colapsados al no tener internet, ni computadoras. El costo de la obra para su reparación no excede los 80 mil pesos pero las prioridades de la autoridad han sido otras.