sábado, 16 de septiembre de 2017

Telefonistas hacen frente a los embates de Slim... El Toque Crítico de Martín Esparza

9 septiembre 2017 | Martín Esparza Flores | Siempre!
En la defensa de sus derechos sindicales y de su Contrato Colectivo de Trabajo, los telefonistas del país están en pie de lucha ante la intención del magnate Carlos Slim de separar Teléfonos de México en dos empresas, contando con la aprobación y el apoyo del Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).

Desde marzo pasado trascendió que el IFT había fallado para que la telefónica más importante del país fuera dividida para dar paso a la marca que ya se publicita en los medios denominada Macronet. En una primera instancia, Slim señaló que la decisión la había tomado el Instituto tras determinar la preponderancia de Telmex imponiéndole la obligación de crear dos empresas; una bajo un esquema corporativo y otra de usuarios básicos.

Tal situación puso en guardia al gremio de los telefonistas que exigieron ser tomados en cuenta en los nuevos proyectos, pues la partición afectaría directamente los derechos laborales de unos 35 mil trabajadores en activo y 20 mil jubilados, al pretender aplicar modificaciones sustanciales al Contrato Colectivo de Trabajo y al régimen de pensiones y jubilaciones.

Luego de tres semanas de negociaciones fallidas, en agosto pasado, la dirigencia nacionaldel Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM) corroboró que fue Telmex quien solicitó al IFT autorizar la aplicación de un modelo de negocios bajo la creación de una nueva empresa; es decir, que en todos los meses anteriores a la agudización del conflicto laboral, Slim y sus directivos buscaron confundir a los trabajadores con el garlito de que el Instituto había impuesto tal decisión.


Pese a la intermediación de la Secretaría del Trabajo y ante la evidencia de que utilizando los recovecos jurídicos de la Reforma a las Telecomunicaciones, Carlos Slim busca menoscabar los derechos laborales de los trabajadores sindicalizados con su proyecto de “división funcional”, sin establecer una negociación razonable, los telefonistas decidieron aplicar un paro laboral de 24 horas el pasado día cinco, en todo el país, mostrando su decisión de no transigir en la cesión de sus conquistas adquiridas.

Ante la embestida patronal, los 40 mil telefonistas en activo y los 20 mil jubilados deben exigir a las autoridades acatar lo dispuesto en el artículo 18 de la Ley Federal de Telecomunicaciones, en donde se establece que “ante cualquier escenario que se resuelva en torno a la empresa, los derechos de los trabajadores tienen que ser escrupulosamente respetados”.

El paro de labores de los telefonistas ha sido un gran paso en la batalla que se aprestan a librar en caso de que la renuencia de la empresa impida llegar a un acuerdo donde se respeten las conquistas plasmadas en su Contrato Colectivo de Trabajo y su régimen de pensiones. En caso de que Slim mantenga su intransigencia en la mesa de negociaciones,los trabajadores preparan su emplazamiento a huelga para el próximo 25 de septiembre. En su lucha no están solos y tenemos la certeza de que recibirán la solidaridad nacional e internacional de sindicatos hermanos y organizaciones sociales.